Raíces desde 1905 Fundado en 1976

En 1905, Francisco Carey (1873-1946) abre su estudio de abogados en la ciudad de Antofagasta y comienza a ejercer la profesión en forma independiente. Su clientela llegó a incluir las principales empresas mineras y salitreras de la época en el norte de Chile y al Ferrocarril de Antofagasta a Bolivia (FCAB), una sociedad inglesa que todavía se transa en la bolsa de Londres y que ha sido atendida hasta el día de hoy por cuatro generaciones de abogados de Carey.

Años 30

En 1935, su hijo Guillermo Carey (1912-1999) inaugura en Santiago una sucursal del estudio de Antofagasta. Paralelamente, asume la cátedra de Derecho Económico de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica, la que ejerce por más de treinta años.

La sala de negociación de la Facultad de Derecho de dicha universidad lleva actualmente su nombre.

Años 40

La firma pasa a ser uno de los estudios de abogados más importantes del país. Su crecimiento en dicha década, tanto en número de abogados como de clientes, es muy significativo, con activa presencia en varias de las transacciones más destacadas de la época. La clientela extranjera incluye a empresas tan importantes como Anaconda Copper Company, Anglo Lautaro Nitrate Company, Cerro de Pasco Corp., IBM, Koppers Co., Ford Motor Co. y Procter & Gamble. Los clientes chilenos incluyen a Antofagasta PLC, Grupo Yarur y Embotelladora Andina, entre otros.

Guillermo Carey sigue liderando la firma y asume, además, la fiscalía del Banco Sud Americano, del cual pasa a ser Presidente del Directorio en los años '60.

Años 50

Guillermo Carey, entre muchas otras actividades, asesora gratuitamente al Gobierno de Chile en asuntos mineros y como negociador de un tratado de libre comercio con la India, negociación en la que tiene como contraparte al Primer Ministro de ese país, Jawaharlal Nehru y a su hija y secretaria, quien después llega a ser Primera Ministra de ese país, Indira Gandhi. También es el autor de la ley del escudo que sustituyó como unidad monetaria por 15 años al peso chileno y a petición del Presidente Jorge Alessandri renegoció la deuda externa de Chile en el año 1959 y fue uno de los redactores del Código Tributario vigente.

Otros socios de Carey y Cía. prestan servicios al país durante dicho período, tales como Alfonso Campos Menéndez, quien fue diputado entre los años 1949 y 1953.

En la década del ’50, los abogados principales del estudio eran, entre otros, Guillermo Carey, Alfonso Campos Menéndez, Guillermo Ramírez, Carlos Urenda, Jorge Fernández y Gustavo Rosselot.

Años 60

En la década de los 60, la firma sigue creciendo con el impulso de nuevas generaciones de abogados y expande sus áreas de práctica, especialmente en el área minera y corporativa. Pasan a ser clientes del estudio grandes empresas industriales y de la minería del cobre, incluyendo a Braden Copper Company, la propietaria de la mina El Teniente, Embotelladora Andina, Compañía Sud Americana de Vapores, Banco Continental, Banco Sud Americano, Celulosa Arauco, Minera Pudahuel, Fensa / Mademsa, el Grupo Briones, Sperry Rand y Laboratorios Wyeth.

En 1967 el estudio traslada sus oficinas al piso más alto del edificio de la IBM, ubicado en Agustinas 1235.

Años 70

En 1971, Carey y Cía. se integra con otra firma chilena de abogados a raíz de la crisis política por la que atravesaba el país. Esta integración se rescinde en 1976 y los clientes y abogados de Carey y Cía. vuelven a la firma, la que se refunda o reconstituye legalmente en ese año. El estudio adopta un modelo similar al anglosajón, en base al cual la única consideración para llegar a ser socio es el mérito profesional. Además, se regulan las políticas de contratación, promoción y retiro de los socios. Sus nuevas oficinas se ubican en Huérfanos 979. En 1978, Carey y Cía. representa a Exxon Corporation en la compra de la Compañía Minera Disputada de Las Condes, operación que inicia el proceso de privatizaciones en Chile y marca el regreso de la inversión extranjera a nuestro país. También participa en un significativo número de otros procesos de privatización, incluyendo los de Cemento Melón y de Enaex.

Años 80

Producto de la liberalización del mercado financiero chileno y de la baja de tasas de interés en los principales centros financieros del mundo, se origina una oferta de crédito muy abundante para Chile. Bajo el liderazgo de Jorge Carey, la clientela bancaria de Carey y Cía. aumenta considerablemente e incluye, entre otros, al Banco Mundial, a la Corporación Financiera Internacional, UBS, HSBC, Bank of America, Midland Bank, Standard Chartered Bank, Citibank, American Express Banking Corporation, Banco de la Nación Argentina, Eximbank, OPIC, EDC, KFW, Libra Bank y otros. Carey y Cía. también es uno de los estudios que representa a los acreedores externos de Chile en la renegociación de la deuda externa chilena con motivo de la crisis de deuda latinoamericana del año 1983.

Década de los 90

Comienzan las colocaciones de ADRs y de bonos en el mercado de Estados Unidos y Carey y Cía. asesora a numerosos emisores chilenos, incluyendo a Laboratorio Chile, Embotelladora Andina, Banco Osorno y Banco Edwards.

El fuerte auge minero que experimenta el país hace que la firma se involucre activamente en múltiples procesos de financiamiento de proyectos mineros, en licitaciones de propiedades mineras y en la subsecuente materialización de dichos proyectos.

Carey y Cía., además, fortalece y desarrolla áreas de prácticas más especializadas, dándole especial importancia a fusiones y adquisiciones, energía, telecomunicaciones, litigios, propiedad intelectual, libre competencia, derecho laboral, ingeniería y construcción, derecho del consumidor y medio ambiente, entre otras. Al final de esta década, la firma pasa a ser una de las de mayor gravitación en el área tributaria bajo la dirección de Jaime Carey y de Ricardo Escobar, quien el año 2006 es llamado a ser Director Nacional del Servicio de Impuestos Internos.

En 1990, la firma se traslada a ocupar seis pisos del Edificio de Las Américas, ubicado en Miraflores 222.

Durante el gobierno del Presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle, el estudio juega un rol clave en los procesos de privatización de sanitarias, de concesiones de obras públicas (carreteras de peaje y puertos) y en la negociación y desarrollo de gasoductos para traer gas desde Argentina a Chile.

En 1995, la gerencia general del estudio lidera un importante proyecto de profesionalización de la administración e introduce tecnología de punta, tanto a nivel de servicios legales como administrativos. Con 26 abogados, Carey y Cía. pasa a ser el estudio chileno con el mayor número de abogados, posición que ocupa desde entonces. En 1996 el número aumenta a 34, en 1998 ya son 49, en 1999 60 y con el cambio de milenio Carey y Cía. llega a un total de 74 abogados.

Década del 2000

En 2002, a petición del Presidente de la República, Carey y Cía. asume ad honorem la coordinación de la defensa del Estado de Chile en el caso Clarín, juicio arbitral ante el CIADI, la mayor demanda de la historia en contra de la República de Chile. En esta década, Carey y Cía. participa en muchas de las fusiones y adquisiciones más grandes realizadas en Chile y en importantes casos sometidos al Tribunal de Defensa de la Libre Competencia. El estudio desarrolla también una nueva área penal y de arbitraje internacional.

Ese mismo año, Jaime Carey es elegido Socio Administrador del estudio.

Por su parte, Jorge Carey fue reconocido por su carrera profesional, obteniendo el premio “Lifetime Achievement Award” de Chambers and Partners en 2007, el de Líder del Año en Latinoamérica por Latin Lawyer en 2008 y el “Lifetime Achievement Award” de Latin Lawyer en 2016.

Década del 2010

En septiembre de 2010, Carey y Cía. cambia su nombre a Carey y se traslada a sus nuevas oficinas ubicadas en el Edificio Titanium, en el barrio El Golf.

En 2012, Carey es reconocida como la Mejor Firma de Latinoamérica por Chambers Latin America, una de las publicaciones legales más importantes del mundo. Durante esta década, la firma ha recibido múltiples premios de prestigiosas publicaciones extranjeras, tales como Chambers and Partners, Latin Lawyer, International Financial Law Review, Who's Who Legal, entre otras.

En 2016, Jorge Carey recibe el premio Lifetime Achievement Award de parte de Latin Lawyer, en reconocimiento a su trayectoria profesional.

En 2017, Carey se convierte en el primer estudio en Chile en tener todas sus áreas de práctica rankeadas en Banda 1 y es el estudio de abogados mejor evaluado de la región por parte de la prestigiosa publicación europea Legal 500.

Década del 2020

En 2021, Jaime Carey es designado secretario general de la IBA, y en 2023, su vicepresidente.

En 2022, Carey es nuevamente reconocida como la Mejor Firma Latinoamericana y Mejor Firma Chilena en la guía Chambers Latin America 2023.

Actualmente, el estudio cuenta con más de +280 profesionales en su área legal y en total trabajan cerca de 600 personas.